En Valencia no hay atención preferencial para adultos mayores en el Saime
A esta situación se encuentran expuestos a diario hombres y mujeres de la tercera edad en todas las oficinas de la institución
Carabobo.- Las tan publicitadas adecuaciones tecnológicas del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime) ponen en desventaja a los adultos mayores, quienes se tienen que valer de algún familiar o allegados. De no contar con alguien cercano, realizar el proceso de autogestión en la web podría depender de un gestor y este servicio no es menor a cinco dólares.
No hay prioridad para la tercera edad, es necesario tomar previsiones y no dejarlo para última hora, lo advierte Máxima Colmenares, quien esperaba sentada desde muy temprano en fila para tramitar su cédula de identidad en la oficina principal de Valencia I ubicada en el sector Los Colorados.
Al igual que ella, muchos de la tercera edad atestiguan lo mismo: prioridad no hay. "Tienes que buscar a alguien te ayude para realizar algún tramite de identidad", responde al unisono al ser consultados sobre las expectativas que mantiene quienes sobreviven a sus años dorados.
Muchos de ellos al no estar familiarizados con el proceso en la página https://www.saime.gob.ve, se acercaban a la entrada del recinto para preguntar sobre la tramitación. La respuesta de los funcionarios que se turnan fue la misma que, en su momento, dio el director general del Saime, Gustavo Vizcaíno: busque la asistencia de un familiar o de su entorno.
Sin embargo, no se evidenció el ofrecimiento de asistencia a persona de la tercera edad por parte del personal pese a que la autoridad rectora -dijo en una pasada entrevista de Unión Radio- que "los servidores públicos en nuestras oficinas están prestando asistencia para adultos mayores con su respectivo trámite con las nuevas adecuaciones en nuestro portal web".
Es natural que algunas personas de la tercera edad oponen resistencia al manejo de tecnologías ya sea por desconocimiento o al no contar con un dispositivo electrónico con acceso a Internet.
Por lo tanto, los ancianos están en su derecho de solicitar asistencia a un funcionario de la institución así como de recibir las consideraciones de lugar. Hay que recordar que en su mayoría sufren de alguna patología lo cual dificulta sus esperas de varias horas a la intemperie.
Ademas de las vicisitudes a las que han acostumbrado al gentilicio venezolano que puedan presentarse en su cotidianidad como fallas de energía eléctrica, de sistemas internos, las alternancias entre rezagados del mes en curso por renovación y expedición del documento de identidad así como los que acuden para tramitar el pasaporte.
A esta situación se encuentran expuestos todos los días los hombres y mujeres de la tercera edad en todas las oficinas de la institución del estado Carabobo, por lo que el sector hace un llamado a tomar los correctivos correspondientes, denunció José Vélez, al tiempo de agregar que, al igual que otras organizaciones o centros públicos en manos del Estado se ha vuelto difícil hallar una atención oportuna -bajo ciertas excepciones-, por razones de ausencia de personal o vicios de la administración pública.
“Venezuela es un país duro para envejecer (...)", reconoció en un pasado el presidente de la Asociación Civil Convite, Luis Francisco Cabezas ante la falta de políticas públicas en materia de acceso a básicos derechos constitucionales a este sector tan injustamente vilipendiado por parte del Gobierno Nacional: la tercera edad.
