Vida plena: Establecer límites es entender hasta dónde podemos llegar
No tener claro los límites puede afectar las relaciones interpersonales porque los límites permiten tener una identidad
Carabobo.- Cuando se enfrentan situaciones desafortunadas de la vida, algunas veces estas podrían ser críticas, traumáticas o de crisis, lo que, según expertos, podría llevar a una persona a sentirse vulnerable, por lo que será necesario plantear un acuerdo para que no termine afectando.
De acuerdo con la psicóloga
Rubbel Jaimes –egresada de la Universidad Arturo Michelena– hablar de límites es dialogar sobre la posibilidad de entender hasta dónde el individuo puede llegar y hasta dónde aceptamos que otros lleguen, porque son las acciones, preferencias o pautas sobre qué sí y qué no aceptamos.
“Lo más importante de los límites es que haya una diferenciación entre quien es el otro y quien soy yo, porque si no existe una diferenciación, entonces cómo yo conozco lo que yo necesito, o cómo el otro sabrá lo que yo requiero”, explicó durante una entrevista a Notitarde.
Agregó que no tener claro los límites puede afectar las relaciones interpersonales porque los límites permiten tener una identidad.
¿Cómo podemos plantear límites?
Afirmó que no existe una fórmula mágica o “sencilla”, como lo pintan las redes sociales, solo existe la posibilidad de que las dos personas involucradas puedan seguir los pasos básicos de la comunicación: emisor, mensaje y receptor.
Continuó señalando que esto también será posible solo si hay un espacio en el vínculo en donde se le permita estás acciones.
“Nos han vendido la idea de que poner límites es algo sencillo. Tú le dices al otro, no me gusta esto, el otro te toma en cuenta y todos vivimos felices en Brasil. Muchas veces no es así, todo depende del contexto”, manifestó.
Límites realistas
La experta explicó que hay que entender que también los límites deben ser realistas, porque no todo el mundo debe aceptar o entender un límite.
“Va a depender del contexto, de la persona, de quién es, de qué necesita, qué no necesita, qué le gusta, qué no le gusta, qué me gusta, qué no me gusta y mi flexibilidad a la situación”, expuso.
Por último, resaltó que las personas no están obligadas a cumplir el límite y es allí donde el usuario decidirá qué podría ser lo mejor para su bienestar mental.