Después de una explosión ofensiva de 28 carreras frente a los 36 mil 796 aficionados en casa de los Red Sox , testigos de una histórica paliza hacia uno de los equipos insignia del béisbol.

De las 28 carreras anotadas, 27 de ellas limpias, lo que sería un nuevo récord para los Azulejos, que iniciaron la fiesta de anotadas, una en el primero, 2 en la segunda, 7 en el tercero, 4 en la cuarta, 11 en el quinto, 2 en la sexta y como para no perder la costumbre, 1 más en el noveno, robándose el show en la última jornada prevista del día en la MLB.

El cubano Lourdes Gurriel Jr. y Raimel Tapia fueron los grandes protagonistas de la noche, el primero por sus seis hits, que lo convierten en el primer cubano con tal cantidad de imparables en un juego de 11 innings y el segundo por su Grand Slam dentro del campo con el que terminó de romper la moral de los Red Sox en apenas la tercera entrada.

Sin embargo, el mayor daño causado por los Azulejos llegó en la quinta entrada contra los Medias Rojas. Al anotar nada más y nada menos que 11 carreras, rompiendo su récord de franquicia de más carreras en un solo juego.

Por su parte, Raimel Tapia por su insólito Grand Slam dentro del cuadro remolcó 6 rayitas al equipo, Danny Jansen también trajo 6, mientras Lourdes Gurriel Jr. llevó a 5 y Matt Chapman a 4.

Los brazos masacrados de Boston serían los rostros de Nathan Eovaldi (9 carreras limpias en 2.2 innings), Austin Davis (5 en 1.1 episodios), Kaleb Ort (8 en 0.2) y Darwinson Hernández (5, 4 limpias en 1.1).