El cantante de 37 años de edad, uno de los raperos iraníes más destacados de la última década, se encuentra detenido en Teherán desde diciembre de 2023, después de ser extraditado desde Turquía, donde fue detenido en 2020. Las autoridades de su país natal lo acusan de varios delitos, entre ellos promover la “prostitución”, difundir “propaganda” contra la república islámica y otros cargos ampliamente definidos de “contenido obsceno”.
Según The Hollywood Reporter, Tataloo, conocido por combinar rap, pop y R&B, contaba con el favor de los políticos conservadores de su país como una forma de acercarse a los jóvenes iraníes de mentalidad liberal (el cantente llegó a tener cuatro millones de seguidores en Instagram). Además, en 2015, Tataloo publicó una canción en apoyo al programa nuclear de Irán, y en la campaña presidencial de 2017 apoyó a Ebrahim Raisi, el candidato más conservador, apareciendo en una foto con él. El año siguiente, en 2018, se fue de Irán y comenzó criticar abiertamente a su gobierno. El veredicto de este lunes, según el medio citado, no es definitivo y puede ser apelado por el cantante.