Internacional.- El magnate de la tecnología Bryan Johnson, de 45 años tiene la intención de revertir el proceso de envejecimiento de sus órganos y volver a tener la salud que tenía hace más de 20 años. Así, según Bloomberg, que habló con el empresario, para lograr este objetivo no solo lleva un estilo de vida adecuado, sino que tiene un equipo de más de 30 médicos y expertos en salud que controlan cada una de sus funciones corporales.

Así, el empresario, que ya ha invertido grandes sumas en su salud, gastará al menos 2 millones de dólares este año, ya que quiere tener el cerebro, el corazón, los pulmones, el hígado, los riñones, los tendones, los dientes, la piel, el cabello, entre otros, de un joven de 18 años. Su equipo, con cada miembro siendo remunerado a 1.000 dólares la hora, está dirigido por Oliver Zolman, un doctor de medicina regenerativa de 29 años, quien lleva más de un año realizando experimentos en el marco del Proyecto Blueprint.

El programa no solo incluye estrictas recomendaciones de dieta, actividad física y sueño, sino también un control permanente de las constantes vitales: cada mes se somete a docenas de procedimientos médicos y luego mide sus resultados con análisis de sangre, resonancias magnéticas, ecografías y colonoscopias, entre otros.

De acuerdo con los médicos, sus esfuerzos ya han empezado a dar frutos, ya que actualmente el cuerpo de Johnson está rejuveneciendo médicamente: sus pruebas muestran que ha reducido su edad biológica general en al menos 5 años. Así, tiene el corazón de una persona de 37 años, la piel de una de 28 y la capacidad pulmonar y la forma física de una de 18 años.

Al mismo tiempo, Zolman subraya que "no han conseguido resultados destacables", aunque sí "pequeños y razonables" avances. Asegura que su trabajo solo ha comenzado, ya que está convencido de que los avances en el campo de la longevidad requieren una búsqueda más certera de fármacos y tratamientos. Señala que les quedan cientos de procedimientos por explorar, incluida una serie de terapias génicas experimentales.

"Mi objetivo es demostrar mediante bioestadística una reducción del envejecimiento del 25% en los 78 órganos para el 2030. Es una idea extremadamente difícil y loca", declaró el médico. "No hay nadie en el mundo que tenga 45 años de vida, pero 35 en todos sus órganos. Si finalmente podemos demostrar clínica y estadísticamente que Bryan ha logrado este cambio, será un efecto tan grande que tendrá que estar relacionado con la intervención y más allá de lo genéticamente posible", añadió.