El ataque ocurrió a menos de 500 metros del que se registró el domingo, cuando un joven de 14 años fue mordido y su pierna también tuvo que ser amputada, en un suceso también ocurrido en la playa de Piedade, situada en el municipio de Jaboatão dos Guararapes.
Con estos dos ataques, se elevan a tres los registros de personas heridas por mordeduras de tiburón en la región metropolitana de Recife en las últimas dos semanas.
El primer ataque se produjo el pasado 20 de febrero, en el municipio vecino de Olinda, cuando un tiburón atacó a un surfista, quien sobrevivió a las mordidas del animal.
El Comité Regional de Monitorización de Incidentes con Tiburones (CEMIT, por su sigla en portugués) indicó a EFE que especialistas de la entidad están «analizando» los dos casos y el «intervalo corto» que tuvieron los recientes ataques.
El organismo señaló que 36 kilómetros de playas localizadas entre los municipios de Olinda y Jaboatão dos Guararapes, pasando por Recife, la capital regional, fueron declarados en «situación crítica» y con «riesgo de nuevos ataques».
A pesar de la señalización de peligro de ataques de tiburón en 150 puntos del área metropolitana de Recife, las personas continúan visitando los lugares y muchos entran al mar desafiando las advertencias.
En total, el estado de Pernambuco contabiliza 77 ataques de tiburón desde 1992, 10 de ellos en el archipiélago de Fernando de Noronha, ubicado a unos 550 kilómetros de la costa continental.