En el evento electoral adelantado se elegirán a los nuevos presidente y vicepresidente del país, así como a los 137 miembros del Parlamento: 15 nacionales, 116 provinciales y 6 por el exterior.
El análisis para estas nuevas elecciones ha bebido mucho de los resultados de los últimos comicios seccionales, (de prefectos provinciales, alcaldes y otras dignidades locales), puesto que se celebraron apenas en febrero pasado y dibujó un mapa político nacional para las organizaciones políticas del país.
En esos comicios la agrupación más votada y que se consagró como la principal fuerza política de Ecuador fue el movimiento Revolución Ciudadana (RC), que lidera el expresidente Rafael Correa; seguido de Pachakutik, brazo político del movimiento indígena ecuatoriano; en tercero quedó el derechista Partido Social Cristiano (PSC), con el que Lasso llegó a la presidencia en 2021 y luego se distanciaron; luego el Partido Sociedad Unida Más Acción (SUMA); y en el quinto lugar se ubicó el Movimiento Creando Oportunidades (CREO), del actual mandatario.
Justamente CREO no participará en las elecciones anticipadas. El pasado 2 de junio, Lasso anunció que no se presentará como candidato; y cuatro días después, Esteban Bernal, presidente del movimiento, dijo que decidieron no presentar candidatos a la presidencia y vicepresidencia de la República, como tampoco candidatos a la Asamblea Nacional.
Con esa decisión de Lasso, el mandatario pondrá fin este año —probablemente a finales de noviembre, cuando asuma el nuevo presidente— a su mandato que inició apenas en 2021.
Las autoridades del Ejecutivo y Legislativo que resulten electas en estos comicios adelantados tendrán un mandato corto, puesto que su objetivo es terminar el período que comenzaron en 2021 los funcionarios cesados; es decir, estarán hasta mayo de 2025.
El sábado pasado, el movimiento de RC, presentó a su binomio para estos comicios, que estará integrado por Luisa González Alcívar, como candidata a la presidencia, y Andrés Arauz, excandidato presidencial por la misma agrupación en 2021 y que aspira a la vicepresidencia. Inicialmente, el exvicepresidente Jorge Glas había sido escogido por el buró nacional del movimiento como su aspirante, pero declinó.