Noboa: Ecuador no ha perdido la guerra contra las bandas criminales, está peleando
Quiso resaltar que 'Fito' "no es el Pablo Escobar", sino un líder más, y que lo están buscando "en todos los lados internacionalmente"
Internacional.- El presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, aseguró este viernes que "Ecuador no ha perdido la guerra" contra las bandas criminales sino que "está peleando", en una entrevista con la emisora colombiana W Radio.
"Esto es una guerra, un conflicto armado interno en el cual estamos luchando contra 22 grupos, unos más pequeños y otros más grandes, que tienen decenas de miles de hombres armados, en el cual se financian por narcotráfico, minería ilegal y al mismo tiempo generan terror", explicó el presidente.
En una de las pocas entrevistas que ha concedido desde que se agudizó la violencia que vive Ecuador y decretó la existencia de un conflicto armado interno, el presidente aseveró que ya han "neutralizado todas las cárceles del país" y recuperado "170 rehenes sanos y salvos".
"Estamos reorganizando estos centros de privación de libertad en los cuales algunos de estos líderes planificaban crímenes (...) y los estamos moviendo de su zona de confort y desarticulando esas redes de criminalidad y de terrorismo", resaltó.
La búsqueda de 'Fito'
Noboa aseguró que luchan contra todas esas bandas y con los líderes de ellas, que en algunos casos son más de 10 para cada una, y no solo contra José Adolfo Macías, alias 'Fito', el líder de la banda más grande, 'Los Choneros' que se escapó a principios de mes de prisión.
En ese sentido, el presidente ecuatoriano quiso resaltar que 'Fito' "no es el Pablo Escobar", sino un líder más, y que lo están buscando "en todos los lados internacionalmente".
Este mismo viernes, llegó a Guayaquil deportada la familia de este delincuente fugado, que se encontraba en Córdoba (Argentina), pero el destino de 'Fito' sigue siendo incierto.
Ante los rumores de que se podría haber fugado del país a Perú, Bolivia o Colombia, Noboa no descartó que se encuentre en Colombia y aseguró que ha pedido a su homólogo Gustavo Petro "que aplique una búsqueda intensa en el país y que tengamos cooperación entre los dos países e inteligencia entre ejército y policía".
Gálapagos, puerto de tránsito
El presidente también se refirió al auge de Ecuador como puerto de cocaína y drogas ilícitas, alegando que Guayaquil es el tercer mayor puerto de Latinoamérica y que al estar la economía dolarizada y tener un buen sistema vial "se vuelve el centro perfecto para trampolín logístico, de sustancias ilícitas".
"La droga que sale de contenedores va principalmente para Europa, pero el espacio marítimo ecuatoriano y de las Islas Galápagos se usa para tránsito hacia México y los Estados Unidos", explicó el presidente, quien recordó que las turísticas islas Galápagos desde hace "cinco o seis años" se han convertido en "un puerto de tránsito, de combustible, así mismo como de droga".
Por eso, subrayó que se están intesificando los controles, poniendo más vigilancia a Petroecuador, para que el combustible no acabe sirviendo al narcotráfico y también fortaleciendo el sistema de vigilancia marítima, con la ayuda de Estados Unidos.
El tema de los presos
Noboa también abordó en la entrevista con la W Radio la idea que señaló la pasada semana de deportar a Colombia presos que se encuentran en las cárceles ecuatorianas, pues estima que hay 3.200 presos en hacinamiento y la mayoría son extranjeros, no solo de Colombia sino de Perú, Venezuela u otros países.
"De acuerdo a la ley ecuatoriana, cualquier sentenciado extranjero con una sentencia ejecutoriada de cinco años o más puede ser expulsado del país y devuelto a su país de origen", recordó el presidente ecuatoriano.
La pasada semana Noboa dijo que empezarían casi de inmediato esa expulsión, una idea con la que Colombia no está completamente de acuerdo y que aún no se ha producido.
Pero el presidente insistió en el coste económico que le supone a Ecuador mantener en sus cárceles a los presos extranjeros y que "es un absurdo" cuando hay "una guerra que pelear y tenemos que recuperar económicamente una nación que está muy golpeada".