"Pues le diré una cosa, eso significa mucho, mucho para mí", expresó Biden al informar que Kennedy Sanders va a ser ascendida a sargento a título póstumo. "Mi hijo pasó un año en Irak: así es como lo perdí", concluyó el presidente.
Sin embargo, en el transcurso de la conversación, Biden pareció recordar que Beau no falleció mientras servía en el Ejército. "Mi hijo Beau vivía cerca de un pozo de quema en Bagdad. Él padeció glioblastoma del tumor cerebral, y lo perdí también", señaló.
Anteriormente, el jefe de Estado en muchas ocasiones confundía la verdadera causa de la muerte de su hijo. Beau Biden sí participó en dicho conflicto bélico entre 2008 y 2009, pero murió de cáncer cerebral en 2015, en el hospital militar Walter Reed en la ciudad estadounidense de Bethesda, Maryland.
Antecedentes de la salud mental de Biden
En el pasado, el mandatario ha sufrido lapsus que han llamado la atención sobre su salud mental, como en un acto en Connecticut, cuando se despidió con la frase "Dios salve a la reina" en lugar del tradicional "Dios bendiga a Estados Unidos". Otro hecho fue cuando preguntó por una congresista muerta en el parlamento.
En mayo de 2022 una sesentena de congresistas republicanos instaron a Biden a someterse a una prueba cognitiva para comprobar su "estado y capacidad actuales" tras varios deslices públicos similares. "Creemos que sin tener en cuenta su género, edad o partido político, todos los presidentes deberían documentar y demostrar unas buenas capacidades mentales", argumentaba la petición, liderada por el congresista republicano Ronny Jackson, quien fue médico en la Casa Blanca durante los mandatos de Barack Obama y Donald Trump.
Con información de Actualidad RT y Agencias