Luego, Itzkovich escuchó los aullidos del perro herido y regresó a matarlo con un cuchillo y un hacha de dos cabezas, temiendo que llamara la atención de los vecinos. En total, la mujer apuñaló al perro más de 40 veces, con 20 cortes y puñaladas en la cabeza y la cara y más de 24 puñaladas en la zona del pecho, dice el texto.
La acusada luego lavó el cuchillo, "con la intención de impedir u obstruir procedimientos judiciales", se cambió de ropa y se dirigió hacia el centro comercial Seven Stars de Herzliya, todavía cubierta de sangre y portando un hacha. En el camino, atacó a un transeúnte y clavó su hacha en el capó de un coche. Al llegar al centro comercial, atacó a un guardia que intentó desarmarla.
Después de su arresto, Itzkovits se quitó la ropa, y durante varios minutos, hizo movimientos obscenos frente a los transeúntes, completamente desnuda.
"Invadieron nuestra casa y nuestros cuerpos"
Los fiscales han descrito el asesinato del menor como "despiadado y cruel" y han solicitado que la mujer permanezca detenida durante el proceso judicial, destacando la gravedad del delito.
Durante el interrogatorio, el miércoles, la acusada alegó que los extraterrestres la secuestraron a ella y a su familia, y que sus acciones eran parte de una prueba para demostrar si podrían ser empleados del Mossad en el futuro, recogen medios locales.
"Invadieron nuestra casa y nuestros cuerpos, controlando nuestras acciones. La sangre de mi hijo no fue derramada en vano. Los extraterrestres están entre nosotros, caminando por la Tierra disfrazados de humanos", expresó.