"Esto nos lleva al punto en que no podemos funcionar. No se trata de una decisión de interrumpir las operaciones, pero a nivel práctico, no podemos funcionar", afirmó la fuente. El objetivo, agregó, es reanudar a la brevedad las operaciones, y aseguró que no se retirarán de la Franja de Gaza porque "la gente nos necesita”. Recalcó, empero, que en las condiciones actuales son incapaces de cumplir sus obligaciones.
"Respetar los edificios de la ONU”
Desde el inicio del conflicto entre Israel y Hamás en octubre, la ONU ha tenido que "retrasar o pausar" en ocasiones sus operaciones, "pero nunca hasta el punto de decir concretamente que ya no podemos hacer nada" como ocurre ahora, añadió el funcionario.
"Debemos encontrar soluciones. Si esto supone parar 24 o 48 horas y partir de cero, tenemos que hacerlo. Ahora, el desafío es encontrar un lugar donde empezar de cero y funcionar eficazmente", agregó.
Consultado sobre cuál sería su principal petición al gobierno de Israel para garantizar la continuidad de las operaciones, el responsable dijo que el ejército israelí debería "respetar los edificios de la ONU", ya se trate de almacenes o refugios improvisados, además de los vehículos de la organización.