La Oficina del Sheriff del Condado de Escambia (EE.UU.) en un comunicado mencionó “Sykes instruyó al niño de 10 años sobre varios métodos para matar al bebé”, “Sykes le ordenó que ahogara al bebé en la bañera, quemara al bebé con agua hirviendo y lo dejara caer al suelo para matarlo. Además, había instruido al menor sobre cómo matar a los adultos con los que vivía temporalmente, cortándoles el cuello con un cuchillo mientras dormían y quemando su casa rociando sábanas con aerosol y prendiéndoles fuego”.

Las autoridades dijeron que el niño llegó al extremo de rociar sábanas con el aerosol, pero que finalmente “no pudo seguir las instrucciones”, aunque sí llegó a dañar al bebé.

El niño de dos meses había sufrido lesiones graves después de que otro niño lo dejó caer al piso de la cocina. “Se espera que el bebé sobreviva a las lesiones”, confirmó un portavoz de la Oficina del Sheriff a The Independent.

Sykes, quien permanece en la cárcel del condado de Escambia sin derecho a fianza, está acusada de un cargo de intento de asesinato y se podrían presentar más cargos, dijeron las autoridades.

Según los registros judiciales, Sykes y su esposo fueron arrestados anteriormente el 28 de mayo después de que un investigador del Departamento de Niños y Familias fue a su casa y descubrió que su hija de 14 años tenía 31 semanas de embarazo y sufría de desnutrición.

Una declaración jurada de causa probable señala que Sykes y su esposo admitieron que sabían que su hija había quedado embarazada por un conocido suyo de 20 años, y que ambos padres no denunciaron la “agresión sexual conocida” contra su hija.