"Era una tripulación bastante experimentada y estaba haciendo una evaluación nocturna anual requerida", afirmó.
Hegseth detalló que se ha ordenado una pausa operativa de 48 horas para las misiones de este batallón mientras se analiza lo ocurrido. Un equipo de aviación de nivel superior del Centro de Seguridad Aérea del Departamento de Defensa se encuentra en Washington D.C. investigando los hechos, agregó.
"Estimamos que la investigación podrá determinar rápidamente si la aeronave se encontraba en el corredor y a la altitud correcta en el momento del accidente", dijo y prometió ofrecer actualizaciones a medida que avanza la investigación.
Un avión de pasajeros de la aerolínea American Airlines que realizaba un vuelo interno, operado por PSA Airlines, entre Wichita y Washington D.C. chocó la noche de este miércoles contra un helicóptero militar cuando aterrizaba en el aeropuerto nacional Ronald Reagan.
A bordo del Bombardier CRJ-700 accidentado iban 60 pasajeros y 4 miembros de la tripulación. Volaba a 121 metros de altitud y a una velocidad de alrededor de 225 km/h cuando sufrió una rápida pérdida de altitud tras chocar contra un helicóptero Sikorsky H-60 Black Hawk, con tres militares a bordo.
Según el jefe de Bomberos local, John Donnelly, no hubo supervivientes tras la colisión.