Esto no es lo mismo que aprender órdenes relacionadas con acciones, como por ejemplo peticiones de sentarse o acostarse, como ocurre durante el entrenamiento, explican los investigadores.

Gaia es capaz de buscar juguetes en otras habitaciones, uno por uno, cuando un adulto se lo pide, sin necesidad de gestos por parte de los humanos.

Y hay más: lo que más impresionó a sus dueños Isabella y Raphael, los investigadores y el equipo de BBC News Brasil fue la posibilidad de seleccionar el juguete solicitado a través de un proceso de exclusión.

Es decir, si se coloca un juguete nuevo (cuyo nombre aún no conoce) entre los objetos ya conocidos, Gea es capaz de cogerlo tras preguntarle por el nombre que nunca había oído antes.

Estas capacidades han sido puestas a prueba y reportadas por investigadores en los últimos años, y BBC News Brasil las analizó más de cerca.

"Incluso para un border collie, que es una raza con gran disposición a aprender, mostró una facilidad de memoria inusual", dice Carolina, quien también es estudiante de maestría en Psicología Experimental en la Universidad de São Paulo (USP).

En marzo de 2020, cuando Gaia tenía aproximadamente 2 años, Carolina se enteró de un estudio en el que investigadores extranjeros buscaban perros con un talento inusual para identificar los nombres de los juguetes.

Isabella y Raphael contactaron a un grupo de investigadores del Departamento de Etología de la Universidad Eötvös Loránd en Hungría, quienes pidieron a la pareja que hiciera una prueba casera con Gaia.

Para participar en la investigación, el perro debía conocer un número mínimo de juguetes, y en condiciones controladas, sin interferencias de Isabella, Raphael o entrenadores.

Por ejemplo, existía una regla según la cual los juguetes debían colocarse fuera de la vista de los humanos y de Gea. El resultado sorprendió a Isabella y a su marido.

"Pusimos unos 20 juguetes en el pasillo de la casa y le pedimos que los fuera a buscar. Y ella los trajo de vuelta, uno por uno. Nos impresionó mucho que supiera tantos nombres, porque nunca intentamos enseñarle", dijo. dice.

"Es una capacidad cognitiva asombrosa porque los humanos también la tenemos. Si juntas un montón de objetos y le pides a un niño que tome un objeto cuyo nombre nunca ha oído antes, es capaz de razonar por exclusión y tomar el objeto que quiere. "Es un nuevo objeto", explica Fugazza a BBC News Brasil.

“Deducen que como ese juguete nuevo es el único desconocido, y los demás tienen un nombre que ya conocen, el nuevo es al que se refieren”. Cuando comenzó la investigación en 2018, dice Fugazza, el objetivo era estudiar cómo los perros entendían lo que decían los humanos.

Según ella, el grupo no sabía que existían animales capaces de reconocer palabras a partir de objetos, hasta que conocieron a un perro que ya tenía esta capacidad lingüística. Gaia se unió oficialmente a la investigación en 2020 y fue el primer perro brasileño en ser identificado como un perro talentoso para aprender palabras .

Hasta entonces, había cinco perros de otros países ya certificados con este talento. En aquel momento, según Fugazza, los investigadores tuvieron grandes dificultades para dar a conocer el estudio y encontrar más perros con esta capacidad.

Entonces, durante la pandemia, crearon un desafío internacional de perros geniales, con la participación de los seis perros, incluida Gaia. El juego constaba de dos fases: en la primera, los perros tenían que aprender 6 objetos en una semana.

En la segunda fase se consiguieron 12 juguetes en una semana. La competición se transmitió en vivo en el canal de YouTube “Genius Dog Challenge”.

Gaia superó ambos desafíos, acertando todos los objetos. Pero lo más sorprendente, según el investigador, fue darse cuenta de que, dos años después del desafío, los perros todavía recordaban los nombres de los objetos con los que habían perdido el contacto.

"Les pedimos a los dueños de perros que escondieran juguetes durante dos años para poner a prueba su memoria. Y nos sorprendió ver que la mayoría de los perros recordaban una gran parte de los objetos", afirma. Cuando se realizó esta prueba de memoria con Gaia, ella recordó nueve de 12 juguetes.

La pregunta que más reciben Isabella y Raphael en las redes sociales, en un perfil donde comparten la rutina de Gaia , es: ¿Cómo enseñaron los nombres de los juguetes?“No le enseñamos, ella aprendió jugando”, dice Isabella.

Estudios realizados por la Universidad Eötvös Loránd indican que, según lo que se sabe hasta ahora, la capacidad de aprender palabras no se puede enseñar. Lo que es posible es que un perro que ya tiene esta capacidad aprenda nuevas palabras.

Para leer en detalles sobre este reportaje puedes consultar la fuente aquí: BBC Brasil