Internacional.- Este 23 de febrero varias zonas han quedado sujetas al miedo y la angustia, debido a las amenazas que la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha hecho sobre gran parte del territorio nacional.

De acuerdo con este grupo al margen de la ley, desde este miércoles 23 de febrero y hasta el próximo sábado 26 de febrero se desarrollará en todo el país una serie de estrategias de amedrentamiento en contra de la fuerza pública y del Gobierno nacional, con algunos atentados ejecutados desde hoy.

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“Contra Duque y su mal Gobierno, el Ejército de Liberación Nacional decreta paro armado en todo el territorio nacional. Se llevará a cabo a partir de las 6:00 horas del 23 de febrero, hasta la 6:00 horas del 26 de febrero de 2022″, explicó esta organización criminal por medio de un panfleto.
Por esta razón, las empresas de transporte de algunas ciudades del país han decidido suspender sus rutas, por miedo a lo que los guerrilleros del ELN puedan hacer en contra de sus buses, especialmente los intermunicipales, que deben recorrer carreteras comandadas por estos delincuentes.

Algunas de las ciudades en las que se decidió bloquear la salida de buses desde sus territorios hacia otras zonas del país son Barranquilla y Cali. En la primera, la decisión se tomó luego de conocerse la explosión que se reportó hace algunas horas en el puente Los Trujillos, en la zona rural de Pailitas, Cesar.

“Unidades antiexplosivos y el Ejército se encuentran en el lugar verificando y haciendo inspección de los hechos. Invitamos a la comunidad a denunciar estos delitos, [como este] que se acaba de presentar, como un acto terrorista”, explicó el comandante encargado de la Policía en este sector de la costa colombiana, coronel Elkin Corredor Rueda.
Asimismo, indicó que “la activación de una carga explosiva” fue la que “afectó de inmediato la calzada nacional”.

Teniendo en cuenta esto, al menos 1.200 soldados de la Décima y de la Quinta Brigada del Ejército tuvieron que ser traslados hasta la zona, con el fin de que actuaran como “agentes de tránsito” para poder desviar a los conductores hacia otras rutas alternas, teniendo en cuenta que el puente vehicular que comunica esta región con el resto del país quedó totalmente destruido.

Los uniformados también estarán encargados de vigilar y custodiar otros 48 puentes ubicados alrededor de la zona del atentado.

Por otra parte, las autoridades de tránsito informaron que, además de los bloqueos en las vías, la decisión también se tomó pensando en salvaguardar la vida de conductores y pasajeros, pues existe un miedo generalizado por los ataques terroristas gestionados por el ELN que se podrían presentar en todo el territorio colombiano.

Así, en el caso del terminal de Barranquilla ya se ha suspendido la venta de pasajes hacia algunas de las principales ciudades del país como Bogotá, Medellín, Bucaramanga, Cúcuta, Ibagué y se espera que en los próximos minutos los directivos de esta organización expidan un comunicado de prensa explicando esta situación.

En cuanto a Cali, al menos seis empresas de transporte anunciaron la cancelación de sus rutas hacia el suroccidente colombiano, acusando temor por lo que pueden ser los ataques del ELN en las rutas de esta zona del país. Cabe recordar que, en la mañana de este miércoles, las autoridades reportaron un ataque terrorista en la vía Panamericana (que comunica a Cali con Popayán, justo a la altura de la vereda Orejas).

De acuerdo con testigos, un camión habría sido quemado por estos delincuentes, en clara demostración de su poder en medio de esta jornada de amenazas en el país.

“Esperamos que con el Plan Democracia, el Gobierno nacional pueda garantizar la seguridad de todos los colombianos, ante las amenazas de los terroristas del ELN”, escribió el senador del Centro Democrático Gabriel Velasco en Twitter, luego de denunciar la quema del vehículo en esta importante vía del suroccidente de Colombia.  (SEMANA)