"Rómulo Betancourt sembró la democracia en nuestro país, logrados en esos años, los únicos 40 años de gobiernos civiles que hemos tenido los venezolanos"
Opinión.- Hoy 22 de febrero se cumplen 116 años del natalicio del compañero Don Rómulo Betancourt, padre de la democracia venezolana. A pesar de que éste es un concepto que manejamos perfectamente quienes hacemos vida en el partido Acción Democrática, para otros no lo es.
Sin embargo, cuando revisamos el historial, las luchas y lo que Rómulo Betancourt consagró al país, encontramos una magnífica obra de instauración de la democracia venezolana. Y digan lo que digan, Rómulo Betancourt sembró la democracia en nuestro país, logrados en esos años, los únicos 40 años de gobiernos civiles que hemos tenido los venezolanos.
Fueron 40 años en los que fuimos capaces de dar la mayor suma de felicidad, alegría y bienestar a todo el pueblo de Venezuela. Y es tanto así que está sembrada en el ideario popular una frase que se acuña con mucha fuerza y entusiasmo para nosotros los adecos como es que con “Acción Democrática se vive mejor”.
¡Y es la verdad! nosotros en nuestros gobiernos transformamos a Venezuela. Cuando asumimos primero el trienio adeco en 1945 introdujimos la única y verdadera revolución social, económica, cultural, educativa y sanitaria que se vivió en el país, porque se sentaron las bases de una nueva Venezuela moderna que estaba para ese momento diezmada por enfermedades que eran endémicas y las llevamos a cero, logrando erradicar esas grandes enfermedades como la lepra, tuberculosis, leishmaniasis y paludismo.
También dimos una fuerte lucha contra el analfabetismo, por ello decimos que transformamos a la Venezuela de aquel entonces que era rural en una Venezuela urbana, industrial, y “sembramos de parques industriales a todo el país”. Por ejemplo, en el estado Carabobo teníamos una zona industrial extraordinaria que generaba empleo y bienestar a las familias carabobeñas y venezolanas. Transformamos un país en urbano, industrial y petrolero.
Llegamos a tener una de las empresas petroleras más poderosas del mundo como lo fue PDVSA, que lamentablemente hoy ha sido destruida por este gobierno, por la corrupción, ineficiencia y la politiquería dentro de una institución petrolera tan importante.
Otra cosa que señalamos con muchísima fuerza en este 116 aniversario de su natalicio es que convertimos a Venezuela en una fuente de oportunidades para la juventud, porque se mejoró el sistema educativo venezolano y sanitario, se multiplicaron escuelas, liceos, universidades, ambulatorios y hospitales que terminaron mejorando la calidad de vida de aquellos venezolanos que morían tempranamente, producto de enfermedades que diezmaban a la población.
Pero un hecho significativo para la juventud venezolana y que merece resaltar como mucha vehemencia es quien puede olvidar el plan de becas “Gran Mariscal de Ayacucho” Nos preguntamos ¿Quién lo puede olvidar? Si fue un plan que les permitió a nuestros muchachos ir a las mejores universidades del mundo a estudiar y prepararse para luego regresar a Venezuela a insertarse en el aparato productivo nacional, generando ascenso social de los hijos de los trabajadores y campesinos que tuvieron la oportunidad de obtener la beca para estudiar en esas universidades.
Cuando hacemos un balance de lo que hemos sembrado en el país, encontramos que las obras de la democracia fueron fundamentalmente construidas en los gobiernos de Acción Democrática y también tenemos que reconocer en los gobiernos de Copei, porque nosotros gobernamos durante 28 años y los copeyanos durante 15 años, y en todos esos años el balance, a pesar de los errores cometidos y de la crisis que hubo en algún momento, y que determinó la llegada de estos destructores al país, sigue siendo positiva, ya que permitió que Venezuela creciera y que en un momento fuese la Venecia de América Latina como lo hemos señalado en múltiples ocasiones.
Por: Rubén Limas Telles
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