Arnaldo Rojas: Un personaje de película
Fue el primer occidental en cruzar el Kurdistán, cazó leones en África, fue espía en China y Corea
Opinión.- En la historia de nuestro país encontramos numerosos sucesos y personajes que, por sus características, pueden calificarse como extraordinarios. Pero varios de estos personajes rayan en lo insólito, desafían la frontera entre realidad y ficción . Recordamos a dos de ellos.
Un personaje de película
La vida de Rafael De Nogales Mendez (1877-1937) es tan apasionante que merece una superproducción fílmica o una miniserie. Peleó en Cuba contra el ejército norteamericano, buscó oro en Alaska y California, fue vaquero en Texas, participó en la Revolución Mexicana, fue gobernador militar en Palestina, Transjordania y el Sinaí. Oficial del ejército otomano en la Primera Guerra Mundial, experiencia que plasmó en su legendario libro “Cuatro años bajo la media luna”, cuyas revelaciones lo convirtieron en una celebridad internacional en la década de los años 20 similar a Lawrence de Arabia. Fue el primer occidental en cruzar el Kurdistán. Cazó leones en África, fue espía en China y Corea. Contó entre sus amigos y admiradores al Rey Leopoldo de Bélgica y al Kaiser Guillermo II de Alemania. Fue corresponsal de guerra en Nicaragua donde conoció a Sandino. Combatió a Cipriano Castro y a Juan Vicente Gomez. Falleció en Panamá, a consecuencia de una operación en la garganta. Pero ni siquiera la muerte fue sencilla para este personaje. Tras ser repatriados, sus restos permanecieron varios días en la aduana del puerto de La Guaira. Nadie reclamó el cuerpo, porque Nogales ya no tenía ningún pariente en el país. Su figura sigue bajo el manto del olvido, quizás porque algunos historiadores cuestionan parte de sus acciones, por ejemplo, aun cuando denunció el Genocicio de Armenia (1915-1923) hay quienes sospechan que participó en esta masacre..
El Drácula de Galipán
Aunque no es propiamente venezolano, fue acogido en nuestra tierra y aquí se forjó su fascinante historia mezclada con la leyenda. El Dr. Gottfried Knoche (1813-1901), nació en Halberstadt, Alemania y vivió 61 años en Venezuela. Llegó a La Guaira en 1840 con el fin de ejercer la medicina y la cirugía. Pronto trajo a su familia y a dos enfermeras. Construyó su casa dentro de los linderos de la finca Buena Vista, en Galipán, en pleno cerro Guaraira Repano. En sus tiempos libres se dedicó a preparar un líquido de su propia invención que, después de inyectado, convertía a los cadáveres en momias, sin necesidad de extraer los órganos vitales.Probó con éxito su fórmula y se sintió feliz al saber que superaba con creces a la momificación de carácter religioso practicada por los egipcios, los más famosos momificadores.
Quienes conocieron al Dr. Knoche refieren que fue un médico muy apreciado por su amabilidad y sus diagnósticos precisos, pero por hacer un cementerio familiar en el patio y la presencia de momias en su residencia (una de ellas, la de un soldado, que puso como guardián en la puerta de entrada) dieron origen a todo tipo de especulaciones y leyendas tenebrosas sobre el galeno y el lugar. Lo llegaron a llamar "El Vampiro de Galipán".
En 1901 murió el Dr. Knoche, fue embalsamado por su enfermera y ama de llaves, Amalia Weismann, quien, a su vez, falleció en 1926 . Ella fue última ocupante de aquella misteriosa casona que quedó abandonada y finalmente saqueada y destruida, las tumbas profanadas y las momias lanzadas al mar. El Dr. Knoche se llevó a la tumba el secreto de su técnica de momificación..
En próximas entregas continuaremos con otros venezolanos insólitos.