La política siempre ha sido cambiante, quienes hoy están aliados en la búsqueda de un objetivo; bien sea electoral o no, mañana pueden tener posiciones totalmente diferentes.
El resultado electoral del 2021 dejó consecuencias muy negativas para algunos partidos tradicionales; como por ejemplo, Primero Justicia, que a simple vista pareciera que su dirigencia y militancia fue absorbida por Fuerza Vecinal.
La Alianza del Lápiz a pesar de mantenerse como una alternativa, no logró alcanzar muchas de las metas que se habían estipulado como base para emprender nuevas luchas; sin embargo, Antonio Ecarri no descansa y recorre diariamente a la Gran Caracas de este a oeste y de norte a sur.
El grupo de partidos que se nuclean en torno al Pastor Bertucci, deberán hacer una revisión profunda de sus propuestas con la finalidad de rescatar el terreno perdido en el 2021, básicamente por la manera autocrática de quien funge como jefe de la coalición, que rechazó posibles nuevas alianzas con el pretexto de que le bastaba con lo que tenía en su entorno para ganar la gobernación de Carabobo.
En lo que respecta al G-4, poco a poco se viene erosionando sin que hasta ahora “la sangre llegue al rio”; sin embargo, no faltan las conspiraciones en contra de Juan Guaidó quien en aras de reconstruir las fuerzas opositoras ha propuesto el Plan Salvemos a Venezuela y la realización de primarias para escoger un candidato único en caso de llegar sin soluciones al escenario electoral del 2024.
Cabe destacar que Manuel Rosales y Un Nuevo Tiempo no ocultan sus aspiraciones de que el líder zuliano participe en esas primarias, por lo que del G-4, ya quedarían tres; pero, si se toma en cuenta que Voluntad Popular debería restearse con el “Muchacho de Vargas”, el grupo se reduce a 1y medio, porque como ya expresamos, Primero Justicia supuestamente está atravesando una profunda crisis.
Así las cosas, ha aparecido una especie de nueva alianza a la que me he permitido denominar “los guardianes de Guaidó”.
Como siempre, Proyecto Venezuela ha asumido un rol importante en defensa de Juan, tal cual una vez lo hicieron con María Corina Machado en aquellos tormentosos momentos cuando la líder de Vente Venezuela era objeto de ataques en cualquier lugar por donde apareciera.
Esta vez los “Salas Romër Boys”, están trabajando en dos vertientes; la primera, reestructurando sus cuadros y rescatando a quienes una vez fueron sus dirigentes a lo largo y ancho de Venezuela; y la otra, participando en las actividades que se convocan dentro del cronograma de “Salvemos a Venezuela”. Berrizbeitia, Aray, Barreno, Rosales, Hernández, Jiménez y el resto de dirigentes, están siguiendo al pie de la letra las instrucciones del Dr. Salas y de Henrique Fernando con objetivos claros y precisos,
Por supuesto que Voluntad Popular (Padre de la criatura), está de frente en este nuevo grupo junto a Copei-ODCA (Saúl Figueredo), La Causa R (partido que en Carabobo está atravesando por un positivo proceso de depuración), Encuentro Ciudadano, movimiento dirigido por Delsa Solorzano y en el territorio de lo posible, capitaneado por Tomás Sáez y el Dr. Luis Beltrán Lara Castillo, Proyecto Carabobo (recordemos que una cosa es PROVE-Proyecto Venezuela- y otra, PROCA-Proyecto Carabobo), Convergencia (Toby Correa); así como también, diversas organizaciones de la sociedad civil y otros partidos que muy posiblemente anuncien públicamente su adhesión a “Salvemos Venezuela”, para de esta manera brindarle un piso más sólido a Guaidó para que pueda enfrentar con éxito las intentonas divisionistas que presuntamente se harán cada vez más frecuentes.
Por ahora, tal cual hizo el Magallanes, este barco navega sobre aguas tranquilas; pero, siempre hay un pero en la vaina, las aguas turbulentas siempre son impredecibles y traicioneras.
Los chismecitos de Doña Meche
No se sorprendan si el dirigente Enzo Scarano regresa a Venezuela en los próximos días; de ser esto cierto, algún movimiento político de gran envergadura pudiese estar por ocurrir en Venezuela.
Interesante la descarga que le dio Tamara Suju a la ex fiscal Luisa Ortega Díaz; quien según algunos analistas, pretende eludir ciertas responsabilidades en hechos consumados durante su gestión.
Por Sergio Márquez Parales