Luis Vargas Pizzolante: Rafael Lacava y su tiempo
Hemos tenido la satisfactoria sensación de que Rafael Lacava poseía todo planificado, desde su propia niñez, porque su clara visión de estadista traspasa tiempos
Opinión.- Ya han transcurrido 7 inéditos años de aquella toma de posesión en el ya lejano 2017, nuestra memoria nos traslada al heroico campo de
Carabobo que recibía, con válida esperanza y optimismo, el arribo de un nuevo mandatario, que se exhibía con la energía y vocación requeridas para transformar definitivamente esta histórica entidad federal. Es
Rafael Lacava con su
Puerto Cabello como principal alegato. La providencia nos ha permitido transitar, a su lado, el extenso sendero. Nos hemos convertido en testigos de excepción de una sobresaliente gestión de gobierno dirigida a todo un pueblo que había aguardado su presencia. El gobernador
Rafael Lacava ha logrado, de manera dinámica, implementar los diferentes proyectos, obras y planes en áreas medulares de esta céntrica y venerada entidad, en connivencia o combinación con las directrices de un gobierno nacional que se ha convertido, a través del presidente
Nicolás Maduro, en el principal aliado de este
Carabobo que está de moda. Es la palpable optimización de la economía, seguridad, salud, educación, cultura y deporte todos llevando la indeleble huella de
Rafael Lacava, que es la filosofía de otorgarle excelencia y relieve a cada uno de sus logros como primer mandatario de
Carabobo. Hemos tenido la satisfactoria sensación de que Rafael Lacava poseía todo planificado, desde su propia niñez, porque su clara visión de estadista traspasa tiempos y su clara palabra como su indiscutible compromiso con esta región asumen su rol de ser obligatorios. Es haber proclamado su filosofía a través de los
14 municipios que conforman el estado y sobre todo haber
transformado y para siempre la altivez de la ciudad de Valencia, para que pueda erigirse como la soberbia capital de Carabobo. El trayecto de
Rafael Lacava es reconocido por ese pueblo con el cual comulga de manera afectiva y efectiva, porque nuestro gobernador ha salido a su encuentro escuchando atentamente sus aspiraciones y exigencias. Amplios sectores de este estado han atendido el llamado de
Rafael Lacava para confeccionar, entre todos, el porvenir de la entidad federal. El gobernador no descansa en su ardua labor de promocionar las infinitas bondades de este
Carabobo que se presenta como principal referencia dentro del contexto nacional. A través de sus impecables planes ha logrado ampliar lo que constituye la base económica de esta fascinante región y allí encontramos con el sostenido crecimiento económico de múltiples empresas que producen servicios, del promisorio aumento del parque industrial, del respaldo a los emprendimientos organizados, de preparar un hábitat confiable para la inversión privada comprometida en generar bienestar colectivo. Es
Rafael Lacava y su tiempo en la constante lucha por mejorar los diversos servicios públicos con ágiles concepciones y planes, es poder presentar una inmejorable infraestructura que ha sido levantada con innegable sacrificio y esfuerzo. Otro aspecto medular de este sendero transformador de
Carabobo es la sensible área de la seguridad pública,
Rafael Lacava interpreta a cabalidad que la sociedad necesita la impostergable certeza y confianza para la inversión, para el disfrute, para la movilización para el emprendimiento. Por ello es que ha procedido a la perfecta articulación con las diferentes manifestaciones u órganos encargados de preservar la seguridad, paz y sosiego, teniendo como soporte fundamental a nuestra
Fuerza Armada Nacional Bolivariana en exacta simbiosis con cada una de las estructuras de carácter policial en su fijado compromiso de colocarle definitivo coto al flagelo del delito y a los focalizados actos de irracionalidad que buscan, de manera estéril, comprometer el futuro de este estado y de esta patria.
Rafael Lacava ha cumplido con aquel formal juramento del año 2017, camina con esa certeza del deber cumplido. Encarna el único y verdadero liderazgo de ese Carabobo que no se rinde. Hemos tenido la satisfacción de observar, desde cerca, su excepcional desempeño como mandatario, pero igualmente como ese gran privilegiado carabobeño que le otorgó a esta histórica entidad el verdadero rango de ser eterna. Luis Vargas Pizzolante
Profesor universitario
Analista político