Opinión.- Este mes de junio se conmemoran en la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Carabobo los cincuenta años de su creación. Dicha facultad deviene de la Facultad de Medicina, nacida del decreto de “reapertura” de la Universidad de Carabobo de la Junta de Gobierno presidida por Wolfgang Larrazábal en 1958, que se iniciaba con las carreras de Medicina, Derecho e Ingeniería. Se dice “reapertura” porque la Universidad de Carabobo viene a ser la continuación de la antigua Universidad de Valencia creada por el jefe de la revolución legalista, el general Joaquín Crespo en 1892 atendiendo a los reclamos de Alejo Zuloaga, quien había sido rector del antiguo Colegio Federal de Primera Categoría, que tenía categoría universitaria, donde se hacían estudios de medicina, creado en 1883 por el presidente Antonio Guzmán Blanco.

 
Pero a su vez, el Colegio Federal de Primera Categoría era el sucesor del Colegio Nacional de Carabobo, primera institución de carácter universitario de nuestro estado, creado por el general José Antonio Páez en 1833, aunque su formación duró largo tiempo y el curso de medicina no se inició hasta 1852. Allí está la génesis universitaria valenciana y la cuna de la enseñanza de la medicina y el derecho en nuestra ciudad, la cual funcionaba en el “Hospital de Caridad” lo que hoy conocemos como la “Casa de la Estrella”, que aparte de ser la primera sede universitaria valenciana, también fue nuestro primer hospital. Su clase inicial fue el 26 de septiembre de 1852, fecha en la cual se inician los estudios médicos en Carabobo, según recuerda el Dr. Guillermo Mujica Sevilla, antiguo cronista universitario y de la ciudad.

 
La crónica recoge los nombres de los dos primeros profesores de medicina valencianos: los doctores Manuel María Zuloaga y Pedro Portero. La primera clase fue en la iglesia de San Francisco. Poco tiempo después, en 1856, en el Hospital de Caridad, el Dr. Antonio Zárraga, aplica por primera vez la anestesia en Carabobo, administrando Cloroformo para extraer un cálculo de la vejiga de un paciente.

 
En esos tiempos las clases se dividían entre el antiguo edificio de los franciscanos al lado de la Iglesia de San Francisco, que todos conocemos como “edificio de la universidad” y el Hospital de Caridad. Allí se hace por primera vez una observación microscópica de sangre en 1893 con una muestra extraída del estudiante Rafael Guerra Méndez mientras el Dr. Eduardo Celis dibujaba lo que se veía en el microscopio.

A raíz de la revolución legalista de Crespo, las instalaciones, bibliotecas y salones de aquel Colegio Federal de Primera Categoría donde se formaron los médicos y abogados del siglo XIX fueron destrozadas e inutilizadas por las tropas revolucionarias, por lo que el caudillo llanero, en gesto de desagravio que lo enalteció, decretó la Universidad de Valencia.

 
En 1904 el dictador Cipriano Castro cerró la universidad y así permaneció por casi medio siglo, pero siempre con la protesta y el anhelo de los valencianos, especialmente muchos médicos entre quienes recordamos, para sólo mencionar a dos Alfredo Celis Pérez y Francisco Ignacio Romero.
Al decretarse la reapertura en 1958 las actividades se inician en la antigua Colonia Psiquiátrica de Bárbula donde se instalan el decanato, auditorios, laboratorios, aulas, etc, siendo el primer decano el Dr. José Valero. El 10 de julio de 1964 se gradúan los primeros 55 médicos en el Paraninfo de la Universidad de Valencia.

 
A principios de los 70 la colectividad del centro del país pedía la creación de nuevas carreras de la salud como bioanálisis, enfermería y odontología, lo que coincidía con el cierre de la UCV por problemas de orden público, produciéndose una inesperada demanda de cupos en el resto de las universidades, por lo que nuestra universidad pasa por una reforma en su Facultad de Medicina que pasa a ser Facultad de Ciencias de la Salud, junto a la Escuela de Medicina y se abren nuevas escuelas: Bioanálisis, Enfermería y Odontología para satisfacer la necesidad de cupos del centro del país. Esta facultad se inició con un ciclo básico con aulas en unos locales en la Av. Lara que ya nadie recuerda. Luego del básico los muchachos pasaban a Bárbula y las prácticas en el Hospital Central.

La Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Carabobo, pese a todas las dificultades, carencias y necesidades lleva medio siglo formando los profesionales que el país necesita. Felicitaciones a toda la comunidad de salud ucista en su aniversario.

 
Luis Heraclio Medina Canelón
M.C. de la Academia de Historia del Estado Carabobo
@luishmedinac