También debemos saber lo que se tiene que hacer para superar esas realidades que se avecinan y que nos permitan avanzar y superar las dificultades
Opinión.- El año que acaba de comenzar es de realidades que el venezolano debe y tiene que aceptar. Y como en esta tribuna decimos lo positivo y lo negativo de la realidad económica de país, es que también debemos saber lo que se tiene que hacer para superar esas realidades que se avecinan y que nos permitan avanzar y superar las dificultades.
Es la vida
Se trata de la realidad del venezolano de a pie, la vida de un trabajador, de un profesional, la vida de una madre y mujer, de un empresario o de un emprendedor que va a ir mucho mejor con las condiciones económicas adecuadas.
El comienzo
Es así como este 2025 que empieza lo que tenemos son realidades o dificultades para el empresario, dificultades para las inversiones, dificultades para el petróleo, en principio por la llegada del nuevo presidente de los Estados Unidos.
Promesas sin cumplir, por ejemplo. Tenemos la realidad de que el Ejecutivo no termina de aprobar una propuesta de salarios acordes con la realidad, que fue presentada hace tiempo y es muy esperada por los trabajadores y también por los empresarios.
Sin embargo, tenemos la realidad, aunque positiva para algunos dirán, dañina para la economía del país. El hecho lamentable del estatismo, que acaban de extender por dos años la inamovilidad laboral.
Ahora bien, mientras no haya un salario acorde, la medida no acaba de ser tan beneficiosa y menos con una economía regulada y normada, por el bendito papá Estado.
Otras normas
Asimismo, acaba de salir el decreto de las importaciones, sin los ajustes que ha pedido la industria nacional y sin correcciones en la política económica. Por eso muchas veces indicamos aquí, lo dañino del papá Estado, que le quita la libertad de crecer al hijo o al ciudadano, en nombre del futuro del país, de su propio bien, decidiendo por él, pero dañando su propia vida.
Son dificultades e, indudablemente, son las realidades las mismas que tenemos que enfrentar.
País con potencial
Pero, sin embargo, tenemos un país de grandes potencialidades, donde hay grandes promesas de inversiones extranjeras como la petrolera.
Somos un punto geográfico extraordinario en el Caribe y América Latina, tenemos una manera de ser positiva y de lucha para dificultades en la vida, una formación sólida y el carácter caribeño del venezolano alegre y de buena cara para todo.
Solo para citar un ejemplo, nuestro país es la puerta de entrada y salida desde América Latina hacia Europa y viceversa.
Tenemos la posibilidad de traer productos europeos, maquinaria europea y de otros países, lo que significa que hay infinitas posibilidades para la producción y el comercio en Venezuela este 2025.
Creo que no se podría esperar más allá porque las frustraciones pueden ser muy grandes.
La realidad
La realidad que tenemos hoy, sobre todo la de los trabajadores no es muy edificante, aunque reconocemos que algunas bonificaciones y programas sociales son positivas, de los mejores en América, pero por un papá Estado que lo quiere “dar todo”.
Pero, lo bueno sería que los ingresos de los trabajadores sean producto de una economía acorde con la realidad, y no en un sistema intervenido y controlado por el papá Estado.
Por eso, hemos recomendado que se reduzca el tamaño del Estado, por la vía de la entrada del sector privado a varios sectores, como el de los servicios. De hecho, una promesa de este tipo hizo la vicepresidenta Delcy Rodríguez, en la última asamblea de Fedecámaras, cuando los empresarios presentaron un informe sobre la situación del país, haciendo énfasis en que les permitieran intervenir en las soluciones.
El problema de la electricidad es un ejemplo claro, donde hay problemas, pero los sectores privados han presentado soluciones. Así lo expresó el presidente de Fedecamaras Adán Celis, con la propuesta de la electricidad del sector privado, solicitando se extienda a otros sectores como el agua y la construcción.
Con ejemplos concretos, de cómo se puede traer una turbina de Siemens o de los países que antes nos abastecían, de cómo en 2 años puede el sector privado sustituir 60 % de las tuberías de agua en las calles y el país.
Al igual que permitan propuestas del sector privado para, en un año, construir otro canal de ida y regreso de vialidad en la Autopista hacia Valencia, o terminar las autopistas del país o los metros paralizados.
Por allí puede estar la solución al problema de los ingresos y, de paso, puede generar empleos. También se necesita un comercio más libre y sin restricciones. Claro que hay temas que debemos considerar, como el tipo de cambio que abre el año con un diferencial muy grande, a pesar de las intervenciones del BCV.
Así comienza este 2025… un año de realidades que podemos transformar en realidades positivas para el venezolano.
*El autor fue ministro de Industria y Comercio
y presidente de Cavidea.
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Tomás Socías