Ahí el Agora: La humildad, misterio valioso
Las personas humildes son amigables, tienen respuestas blandas, son agradecidas, son hermosas, colaboradoras, aceptan consejos
Opinión.- Nótese que la humildad tiene la esencia en la pureza con la se mueve un corazón. El ser humilde te aproxima a la tierra, (humus) y a Dios. Las personas que tienen comportamientos humildes son genuinamente portadoras de la llave que les abrirá constantemente puertas.
Las personas humildes son amigables, tienen respuestas blandas, son agradecidas, son hermosas, colaboradoras, aceptan consejos. Todos quienes se mueven en el radio de la humildad, se mueven con un poder distinto y superior a la arrogancia y antipatía, siempre la humildad tiene ventajas porque es el sostén o base para que cuando se produzca la bendición, no se empañe.
No se necesita tener un grado de cum laude para estructurar un escenario donde se mueva la sencillez de corazón. Los humildes jamás promoverán las discordias o focos negativos que desenfoque un proyecto de familia y empresas, porque tienen un corazón sano.
La visión de un presente y futuro formulado para alcanzar un objetivo -entiéndase las conquistas normales de la humanidad-, tiene su epicentro en la humildad conque se elaboren y ejecuten los planos y maquetas de vida. No es malo el aspirar y crecer como personas, malo es que se haga todo esto con un despropósito y un corazón dañado.
Quien se mantenga en ese misterio valioso de la humildad, puede entender, creer y esperar buenas recompensas, porque la humildad, en sí misma, es un principio al igual que la siembra y cosecha. Si quieres tener éxitos y puertas abiertas en la vida, siembra humildad para que se te den buenos frutos.
Jesús, nuestro Señor, propuso una parábola a la altura del capítulo 14 de Lucas, donde reflejaba la hipocresía, el deseo de algunos que lo adversaban -fariseos-, estos querían los primeros asientos. El Señor miraba cómo ellos escogían los primeros asientos de la mesa. Eran los aristócratas de la época. Les dijo, cuando fueres convidado de algunos a bodas, no te sientes en primer lugar.
Cuando no se tiene un corazón sano, la humildad es ausente. Muchos desean los primeros lugares para ser reconocidos, alabados, son personas inclinadas al valor que pueda tener una posición, cargo o privilegio sin importar pasarle por encima a otras personas.
Cuando la humildad no existe en los corazones, es el egoísmo y egocentrismo los que toman parte, el valor a ser reconocido y de que le aplaudan para muchos es más relevante, la dosis que los mantiene en pie, es su más tozudo interés el ser siempre los primeros.
¿Por qué Jesús aconseja no procurar denodadamente ser los primeros, ser el más grande, el más aplaudido, el tener los primeros lugares y asientos que plantea el abanico de la vida? Por qué nuestro Señor refleja e invita a la humildad? Sencillamente es que sea probable que, de tomar los primeros asientos, de querer apresuradamente alguna cosa, genere un desagrado a Dios, no porque sea malo alguna aspiración de querer subir de nivel, sino porque muchas veces el turno al bate y la honra es para otro en ese momento y lugar. Lo recomendable es que desde la humildad espere el tiempo para que Dios sea quien te promueva. Preocúpate por practicar la sensatez, la preparación en alguna área, ser el primero más bien en felicitar y ver con buenos ojos cuando llamen a otros para ocupar los primeros lugares y asientos, y no a tí. Cuando entiendas este misterio, seguramente ya vendrá en camino tu promoción y llamado para que tú estés en lugares privilegiados. Eso viene, sé humilde.
¡Sí se puede amigo lector (a), es por aquí la plaza pública comunicacional!
Otrosí o nota: Seguimos orando por las mejoras de los servicios; en Puerto Cabello se torna incómodo el largo tiempo que tienen muchas familias sin su preciado líquido. Se están haciendo nuevamente largas colas para comprar gas. Pero seguimos creyendo que Dios hará algo grande.
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Lister Monteverde