Crónica Criminal del Pasado: Breves de sucesos (de hace más de cien años)
En los tiempos de principios del siglo pasado, en Venezuela las dictaduras imponían una terrible censura noticiosa, pero algunos sucesos delictivos se colaban en la prensa; He aquí algunos casos que burlaron la censura:
Opinión.- La percepción de seguridad tiene que mucho con lo que la gente conoce sobre la delincuencia. Si la censura de un gobierno autoritario no permite que se conozca qué es lo que pasa, una persona desprevenida podrá pensar que no existe mayor delincuencia, pero la realidad puede ser muy distinta. En los tiempos de principios del siglo pasado, en Venezuela las dictaduras imponían una terrible censura noticiosa, pero algunos sucesos delictivos se colaban en la prensa; He aquí algunos casos que burlaron la censura:
En el diario “El Cronista” de Valencia, de 1905, consultado en la Biblioteca de la Academia de Historia del Estado Carabobo podemos ver: “Ladrón célebre. La autoridad de la Jefatura Civil del Municipio San Blas dio caza en El Paují al célebre ratero Juan Hurtado…Este hombre no dejaba pasar un día sin que ejecutara sus habilidades de experto ladrón. El jefe civil lo puso a disposición del comandante de policía…quien descansará ahora en la casa de corrección.”
MUERTE INSTANTÁNEA. El señor Manuel Tovar puso fin a su existencia disparándose un tiro de revólver que le produjo la muerte instantáneamente.
ARRESTADOS. Nepomuceno Morillo y Juan Ceballo por hurto. Anastasio Silva por averiguación de hurto. Francisco Ramón Correa y Blas A. Mendoza por juegos prohibidos. Gerardo Arvelo por ebrio.
DE LA QUINTA. En días pasados dos ladrones pudieron cargar con una gordísima marrana, propiedad de una familia del Municipio San Blas, pero con una suerte tan adversa que la autoridad del lugar les dio caza y los llevó a descansar al Cuartel de Policía, sin concederles tiempo para vender el hermoso animal.
MUERTE DE UN LADRÓN. Un individuo de nombre Carlos Picón, a quien la policía solicitaba desde hace tiempo por haber cometido varios robos murió el pasado 20 del mes próximo pasado a consecuencia de una herida que le infiriera el agente Juan Gudiño. Picón al ser intimidado a darse cuenta preso tiró dos machetazos al policía Gudiño, quien, en defensa propia se vio en el caso de hacer fuego contra aquel. El tribunal esclarece los pormenores de este incidente desgraciado.
Por su parte, el diario caraqueño “El Noticiero” a principios de 1909 reseñaba:
“Josefina Tejera fue arrestada por orden del jefe civil de San José por el hurto de unas prendas”.
En esos mismos días la policía demostró ser efectiva, ya que se informaba que el comandante Antonio Ramos devolvía a Luis Felipe Toro “nueve pares de suelas de alpargata que habían sido robadas de su casa de habitación”. Igualmente devolvieron a Guillermo Caballero una cabra que le había robado a Juan Vicente González.
En agosto señalaba el mismo diario:
“En la mañana de ayer por un lugar denominado Pagüita, Arturo Rodríguez fue asaltado por Crisanto Delgado, quien le dio unos planazos… el agresor fue aprehendido y conducido al cuartel respectivo, de orden del coronel Antonio Delfino.”
En abril de 1910 el “Noticiero” informó que Ramos fue detenido por robar en la Academia Militar una cobija, una hamaca y una sábana pertenecientes a un empleado.
Mientras que en Monte Piedad, unos rateros que se introdujeron en una casa para robarse unas gallinas fueron espantados a tiros por el dueño del inmueble.
Finalmente Jesús Tovar se robó varios bombillos del alumbrado eléctrico de la Plaza Bolívar, pero la policía lo capturó de inmediato.
En todos los tiempos y en cualquier lugar han existido los ladrones, solamente que en libertad es que podemos conocer de sus vagabunderías.
Por Luis Heraclio Medina