Esto se desprende de un trabajo de investigación del medio Newsweek, en la que refiere que el abogado salvadoreño estadounidense Eyvin Hernández, solicitaba a través de una carta petitoria al presidente Joe Biden, su canje y de otros estadounidenses, incluidos Jerrel Kenemore, Jason Saad y Joseph Cristella, a cambio de Saab.
Como se recordará, Hernández fue arrestado por las autoridades del país en zona fronteriza venezolana el 31 de marzo de 2022. Fue acusado de ingresar ilegalmente a Venezuela, aunque el Departamento de Estado de los EE UU lo declaró "detenido injustamente" en octubre.
Una fuente familiarizada con el caso informó al medio sobre dicha carta de Hernández. En él, el detenido afirma que su familia ha sido informada de un posible acuerdo que lo liberaría a él y a otros estadounidenses a cambio del empresario colombiano Alex Saab.
Saab fue detenido el 12 de junio de 2020 por las autoridades locales en Cabo Verde a pedido de los EE UU durante una parada de combustible cuando se dirigía de Venezuela a Irán para lo que se decía que era una misión diplomática y humanitaria. Fue extraditado en octubre de 2021 a EE. UU., donde enfrenta juicio para reconocimiento de su inmunidad diplomática.
El gobierno venezolano reitera la liberación de Saab, quien fue designado Enviado Especial en abril de 2018 y, por lo tanto, le otorgó inmunidad diplomática por parte de la administración del presidente Nicolás Maduro.
Estados Unidos se niega a reconocer el estatus diplomático de Saab ya que Washington cortó los lazos con Maduro en enero de 2019, siendo el juez Scola el encargado de incluir en una sentencia “que el gobierno de Biden reconoce a Guaido” quien en enero fue despojado del “interinato”.
Precedente
Aunque ni EE. UU. ni Venezuela han confirmado los detalles de dicho acuerdo, existe un precedente reciente para el intercambio de detenidos a pesar de la disputa política en curso. En octubre pasado, Biden confirmó que había firmado el mayor canje de prisioneros de su presidencia en un acuerdo con Maduro.
El acuerdo vio a siete ciudadanos estadounidenses, incluidos los empleados de Citgo, José Pereira, Jorge Toledo, Tomeu Vadell, Alirio Zambrano y José Luis Zambrano, así como el ex cabo de la Marina de los EE. UU. Matthew Heath y el graduado de la Universidad de Florida Central Osman Khan, liberados a cambio de los venezolanos Efraín Antonio Campo Flores y Franqui Francisco Flores de Freitas, quienes son sobrinos de políticos de Maduro.
Cuando se le preguntó si la administración de Maduro estaba interesada en un intercambio destinado a liberar a Saab, una fuente venezolana que habló bajo condición de anonimato porque no está autorizada para hablar con los medios dijo a Newsweek: "Sí, las autoridades venezolanas han expresado el deseo de la liberación del Enviado Especial Alex Saab" y que "las autoridades venezolanas han indicado claramente que les gustaría ver un intercambio".
La fuente venezolana dijo que este deseo ha sido comunicado a la parte estadounidense en relación directa con la posibilidad de un intercambio que involucre a ciudadanos estadounidenses.
Al ser contactado para hacer comentarios, un funcionario de la administración de Biden que habló en segundo plano le dijo a Newsweek que “la seguridad del pueblo estadounidense es nuestra máxima prioridad”.
Un portavoz del Departamento de Estado de EE. UU. que habló en segundo plano también se negó a "discutir las conversaciones diplomáticas en curso", en cambio, citó la posición declarada del secretario de EE. UU. Antony Blinken y dijo que la administración Biden estaba presionando activamente para la liberación de los ciudadanos estadounidenses detenidos en Venezuela.
“Como ha dicho el secretario Blinken, él se enfoca personalmente y prioriza traer a casa a los ciudadanos estadounidenses retenidos como rehenes o detenidos injustamente en el extranjero”, dijo a Newsweek el portavoz del Departamento de Estado. “Continuamos presionando por la liberación inmediata e incondicional de todos los ciudadanos estadounidenses detenidos injustamente en Venezuela en cada oportunidad y continuaremos haciéndolo”.
“Tomamos en serio nuestro compromiso de ayudar a los ciudadanos estadounidenses, y continuaremos presionando por un trato justo y transparente y acceso consular para todos los ciudadanos estadounidenses detenidos”, agregó el portavoz del Departamento de Estado. "Si un ciudadano estadounidense es detenido en el extranjero, el Departamento supervisa cuidadosamente el caso y brinda asistencia consular cuando es posible".
El portavoz del Departamento de Estado se negó a comentar más "debido a consideraciones de privacidad".
Sobre si apoyarían tal intercambio, los representantes de la campaña Bring Eyvin Home organizada por familiares y amigos para asegurar la liberación de Hernández dijeron a Newsweek , "creemos que todas las opciones que conduzcan al regreso de Eyvin a casa deberían estar sobre la mesa y continuamos abogar por que nuestro gobierno tome las decisiones que lo traerán a casa lo más rápido posible".
El caso de Hernández también ha recibido atención del Congreso. En noviembre, una carta de los senadores de California Diane Feinstein y Alex Padilla instó a Blinken a priorizar el regreso seguro de Hernández, y al mes siguiente, una carta firmada por 22 miembros del Congreso y la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass , pidió a Biden que asegurara la liberación de Hernández.
También han surgido campañas dedicadas a la liberación de Saab en Venezuela y otros países, ganando atención en los círculos oficiales y de base.
Si bien Caracas y Washington siguen enfrentados, el gobierno de Biden ha aliviado algunas sanciones petroleras a Venezuela, la más reciente en noviembre, a medida que surgieron esfuerzos para reiniciar las conversaciones organizadas en México entre el gobierno venezolano y la oposición. La medida de EE. UU. permitió a Chevron reanudar actividades de bombeo "limitadas" en Venezuela bajo la expectativa de avances en las negociaciones políticas que anteriormente estaban suspendidas como resultado de la extradición de Saab a EE. UU.
Así mismo el Movimiento Free Alex Saab, organizaciones de DDHH y la Liga Tunecina que recientemente nominó al Enviado Especial de Venezuela al Premio Nobel de la Paz, han mostrado su apoyo al caso y siguen en campaña desde hace más de dos años.
