Impuesto a las transacciones y aumento del salario afianzan la recuperación económica
Son una especie de punta de partida para afianzar la recuperación económica del país
Venezuela.- En
días recientes entraron en vigencia en Venezuela, dos medidas que, a juicio de dos diputados de la Asamblea Nacional, son una especie de punta de partida para afianzar la
recuperación económica del país que comenzó a finales del año pasado.
Orlando Camacho, parlamentario y presidente de Fedeindustria, cree que “el nuevo salario mínimo, es un punto de partida y no de llegada que comienza a reflejar la recuperación del poder adquisitivo” de los venezolanos.
“Hay mucha menos presión inflacionaria que en otras oportunidades. Claro que aumentan los costos de las empresas, pero con competencia de marcas los precios se autorregulan”, aseguró.
El nuevo salario que comenzó a pagarse desde el último de este mes asciende unos 30 dólares o 130 bolívares, a lo que se suma el bono de alimentación que es de 45 bolívares.
Respecto a la entrada en vigencia del Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras que pecha las operaciones en divisas, Camacho destacó que es una medida que busca fortalecer el uso del bolívar que también forma parte de la recuperación de la economía.
Señaló que “la gente comienza a decir, si me quiero ahorrar ese impuesto mejor voy a la banca a cambiar los dólares por bolívares. Igualmente, las empresas, para pagar a proveedores, pueden cambiar las divisas por bolívares, y se ahorran el tributo”.
Por otra parte, Camacho negó que exista escasez de bolívares. Insistió en que el comerciante debe garantizar el vuelto y pedir el efectivo a la banca.
“La banca debe hacer un trabajo importante, cada vez que se le consulta al BCV cómo está el inventario de efectivo, resulta que clientes de la banca no lo solicitan, por eso hay que ir rescatando lo que fue alguna una vez, que es dar el vuelto exacto en billetes y monedas”, agregó.
Aseguró que “están los inventarios llenos de billetes disponibles en el BCV”.
“Cuando pagas por pago móvil, el banco cobra una comisión y la operación le es más sencilla, pero cuando tiene que ir a comprar el billete al BCV, genera gastos de transporte, estacionamiento, para llenar los cajeros y eso le cuesta a la banca”.
Por ello, advirtió que “si los comerciantes no reclaman y piden el efectivo para dar el vuelto exacto, entonces generamos inflación, porque obligamos el redondeo”.
“Hay que decirle a la gente que sí hay billetes en el BCV y que necesitamos que se comiencen a utilizar”, sostuvo.
Homologar el bolívar
En la misma tónica se pronunció el economista y diputado, Ramón Lobo. Aseguró que el IGTF se hizo para homologar el uso del bolívar frente al dólar.
“La alícuota no ha sido modificada y se mantiene en un 2%. El impuesto se implantó con objetivo homologar la utilización de las divisas con respecto al bolívar.
“En todo proceso inflacionario, los ciudadanos buscan la manera de garantizar el poder adquisitivo de la moneda, refugiándose en una moneda dura o una divisa; una moneda extranjera de libre convertibilidad, en este caso dólar, euro, yuan o peso colombiano”, afirmó Lobo.
“Esta reforma es para fortalecer el empleo del bolívar, incrementar la oferta de divisa en el mercado cambiario, ya que, si hay una mayor cantidad de divisas, su precio se estabiliza en las casas de cambio. En tercer lugar, la utilidad fiscalista para el Estado venezolano es que le va a permitir mayores ingresos”, enfatizó.
“Por ejemplo, si un ciudadano posee una cuenta en divisas en un banco X, y otra persona tiene una cuenta en esa misma entidad financiera, y le transfiere cierta cantidad en divisas a esa persona, se le cobrará 3% por la operación. Si la realiza en bolívares pagaría 2%”, explicó el diputado.
Dijo que, en el caso “en el caso de hacer compras en un establecimiento comercial, quien está recibiendo el pago, que es tipificado por la Ley como un Contribuyente Pasivo Especial, se le debe cancelar el 3%”.
Por Janet Yucra
