Otis tocó tierra en el Pacífico mexicano en las primeras horas del miércoles, a 75 kilómetros al sureste de Morelia, Michoacán, y a 260 km al nor-noroeste de Acapulco, uno de los principales destinos turísticos del país, en el sureño estado de Guerrero.
Según la Comisión Federal de Electricidad (CFE), el huracán provocó que más de medio millón de personas se quedaran sin luz y señaló que los potentes vientos de Otis provocaron el colapso de 58 estructuras de alta tensión en el estado, problema que dejó sin luz a decenas de municipios y afectó las telecomunicaciones.
En las últimas horas, Otis se redujo a tormenta de baja presión durante su paso sobre el estado de Michoacán, vecino del sureño estado de Guerrero, informó el Servicio Meteorológico Nacional (SNM), aunque apuntó que las intensas lluvias, provocadas por los remanentes de Otis, continuarán este miércoles y jueves.