El Alto Comisionado Volker Turk, "miente y acusa al gobierno venezolano de de torturar, detener arbitrariamente y perseguir a ciudadanos luego de los hechos violentos que se suscitaron al concluir las elecciones presidenciales del 28-J", señala.
En este sentido, asevera que lo dicho por Türk "carece de sustento y objetividad, evidencia la subordinación del Alto Comisionado a los intereses del decadente imperio estadounidense y su uso descarado como herramienta de agresión política contra nuestra patria".
"Denunciamos que el Alto Comisionado Volker Turk, quien tiene las manos manchadas de sangre, producto del asesinato de niños y niñas en Gaza, Siria y Líbano, sumiso a una agenda imperial, pretende atacar a Venezuela repitiendo la narrativa fabricada por la extrema derecha venezolana", reza parte del comunicado.
Asimismo, declara que "se ha convertido a la Oficina del Alto Comisionado de los DD.HH. de la ONU en espacio al servicio de los sectores que promueven el caos, la desestabilización y la intervención extranjera, ignorando deliberadamente las acciones violentas financiadas desde el exterior, que tras las elecciones de julio dejaron 28 muertos, incluidos crímenes de odio, y cientos de heridos, entre ellos agentes de seguridad del Estado".
Aclaro que Venezuela es un Estado soberano, "a diferencia de lo que intenta imponer este organismo politizado, nuestras instituciones han actuado con estricto respeto a la ley, garantizando derechos y otorgando beneficios procesales a los detenidos. Rechazamos además los ataques contra leyes legítimas, como la Ley de ONG y la Ley contra el Bloqueo Imperialista, que protegen a nuestra nación de actividades desestabilizadoras y agresiones externas dirigidas a socavar nuestra soberanía".
"El comportamiento errático y selectivo de la OACNUDH descalifica completamente cualquier pretensión de imparcialidad. Le recordamos a su titular y al sistema que representa que Venezuela no aceptará intentos de tutela ni injerencias coloniales disfrazadas de preocupaciones por los derechos humanos", resaltó.
En conclusión, Venezuela "exige respeto absoluto por su institucionalidad y democracia, y reitera que continuará defendiendo con firmeza su independencia frente a los ataques de cualquier potencia extranjera o sus cómplices internos. Nuestra lucha por la soberanía, la paz y el bienestar del pueblo venezolano es irrenunciable y enfrentará con valentía cualquier amenaza".
Por su parte el embajador de Venezuela ante la ONU, Alexander Yánez, rechazó el informe y exigió respeto a la institucionalidad del país. En su intervención en el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, Yánez destacó que Venezuela goza de una “vibrante democracia participativa y protagónica” y subrayó que el gobierno de Nicolás Maduro ha logrado resistir las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea.