En tal sentido expresó: "hoy denunciamos desde el país, la aplicación de una ley contratia al derecho humano, como la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798, una ley anacrónica que criminaliza a cualquier migrante para capturarlos y llevarlos a un campo de concentración en El Salvador. Actualmente vivimos dos agresiones, una de carácter económico y una de carácter humanitario contra nuestros migrantes",
Asimismo, señaló que "la agresión es contra el mundo entero, la guerra comercial económica arancelaria contra 180 países, ha desatado lo que se puede calificar como el fin de la globalización occidental, queda herido de muerte el derecho comercial, económico, internacional, público, así como los acuerdos bilaterales y multilaterales en materia de comercio, ha quedado sepultada la Organización Mundial de Comercio".
Finalmente, recalcó que "la ofensiva que hay contra el mundo entero, contra nuestra región para tratar de imponer una época de dominación imperial, nos obliga a plantearnos un despertar colectivo de la conciencia de los pueblos y los gobiernos que amamos nuestra soberanía, nuestra autodeterminación, y tenemos un amor profundo por el sueño de un futuro en libertad, con soberanía e independencia, con prosperidad ganada y trabajada por nuestros pueblos en unión fecunda de nuestra región".