Según un estudio alemán que evaluó la infertilidad en más de 20 mil pacientes varones remitidos a un centro de fertilidad, no se pudo establecer un diagnóstico para cerca del 70% de ellos. Un porcentaje significativo de pacientes varones sin hijos no tiene explicación para su infertilidad.
Las investigaciones también indican una tendencia a la disminución de la concentración y el recuento total de espermatozoides en los últimos cuarenta años. Paralelamente a la disminución del recuento de espermatozoides, la prevalencia de la obesidad infantil ha aumentado en todo el mundo de 32 a 42 millones. Los observadores estiman que alrededor del 60% de los niños de hoy serán obesos a la edad de 35 años.
Las encuestas italianas también han revelado hipotrofia testicular en casi una cuarta parte de los jóvenes de 18-19 años, cuya fertilidad futura está, por tanto, en peligro. Diversas condiciones ambientales (como la exposición a sustancias químicas que alteran el sistema endocrino) y hábitos personales (como el sedentarismo o los trastornos alimentarios) han cambiado drásticamente en las últimas décadas.
Se desconoce el impacto de la obesidad y los trastornos metabólicos relacionados con la obesidad sobre el crecimiento testicular en la infancia. Los investigadores realizaron aquí un estudio retrospectivo y transversal en niños y adolescentes de 2 a 18 años, remitidos a la Unidad de Endocrinología Pediátrica de la Universidad de Catania, en Italia, para el control del peso corporal.
Los investigadores recogieron datos sobre el volumen testicular, la edad, el índice de masa corporal y la resistencia a la insulina en 268 niños y adolescentes. Descubrieron que los niños con peso normal tenían un volumen testicular 1,5 veces mayor que los que tenían sobrepeso u obesidad en la edad peripuberal.
Los niños y adolescentes del estudio con niveles normales de insulina tenían un volumen testicular entre 1,5 y 2 veces mayor en comparación con los que padecían hiperinsulinemia, una afección asociada con frecuencia a la diabetes de tipo 2 en la que los pacientes tienen niveles más altos de insulina en sangre.
Así, las personas con sobrepeso u obesidad, hiperinsulinemia o resistencia a la insulina mostraron un volumen testicular inferior al de sus compañeros sanos.
Dado que un menor volumen testicular predice una menor producción de espermatozoides en la edad adulta, los investigadores creen que la pérdida de peso podría ayudar a los pacientes a evitar la infertilidad en etapas posteriores de su vida.
«Aunque la prevalencia de la obesidad infantil está aumentando en todo el mundo, no se conoce bien el impacto de la obesidad y los trastornos metabólicos asociados en el crecimiento testicular», afirma Rossella Cannarella, una de las autoras del trabajo.
«En este estudio, descubrimos que el sobrepeso o la obesidad se asociaban a un menor volumen testicular peripuberal –prosigue–. Además, se ha descubierto que las comorbilidades relacionadas con la obesidad, como la hiperinsulinemia y la resistencia a la insulina, influyen en el volumen testicular en la prepubertad y la pospubertad».
«Por lo tanto –concluye–, especulamos que un control más cuidadoso del peso corporal en la infancia podría representar una estrategia de prevención para mantener la función testicular más adelante en la vida».