Mortal: Picadura de garrapata está causando alergia a la carne roja
Aparece después de comer carne roja o consumir productos con alfa-gal, un tipo de azúcar presente en la mayoría de los mamíferos
Salud.- Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han lanzado una alerta sobre un "problema emergente de salud pública" causado por la picadura de garrapatas y vinculado al consumo de carnes rojas, de acuerdo con dos estudios recientes.
Se trata del llamado síndrome alfa-gal (SGA), una reacción alérgica grave, potencialmente mortal, que aparece después de comer carne roja o consumir productos con alfa-gal, un tipo de azúcar presente en la mayoría de los mamíferos.
El síndrome suele estar causado por la
picadura de la garrapata estrella solitaria, que transfiere alfa-gal al organismo de la víctima, lo que a su vez desencadena una respuesta del sistema inmune.
La estadística entre 2010 y 2022 documentó más de 110,000 casos de SGA pero, según los CDC, el problema ha sido infravalorado en Estados Unidos porque mucho médicos ni siquiera saben que existe.
¿Dónde está presente el alfa-gal?
La alfa-gal (galactosa-α-1,3-galactosa) es una molécula de azúcar que se encuentra en la mayoría de los mamíferos, explica una nota en la página web de los CDC.
Los peces, los reptiles, las aves y las personas no contienen alfa-gal.
El alfa-gal puede encontrarse en la carne (cerdo, ternera, conejo, cordero, venado, etc.) y en los productos elaborados a partir de mamíferos (incluida la gelatina, la leche de vaca y los productos lácteos).
¿Qué es el síndrome alfa-gal?
El síndrome alfa-gal (AGS) es una afección alérgica grave y potencialmente mortal.
El AGS también se denomina alergia al alfa-gal, alergia a la carne roja o alergia a la carne picada por garrapatas. El SGA no está causado por una infección. Los síntomas del AGS aparecen después de que las personas comen carne roja o estén expuestas a otros productos que contengan alfa-gal.
Los casos de AGS no son notificables a nivel nacional a los CDC, por lo que no se sabe cuántos casos de AGS existen en los Estados Unidos. Se necesitan más datos e investigaciones para saber cuántas personas están afectadas por esta enfermedad, según los CDC.
¿Cuáles son los síntomas del AGS?
Las reacciones al AGS pueden incluir:
- Urticaria o erupción cutánea con picor
- Náuseas o vómitos
- Acidez o indigestión
- Diarrea
- Tos, falta de aliento o dificultad para respirar
- Descenso de la tensión arterial
- Hinchazón de labios, garganta, lengua o párpados
- Mareos o desmayos
- Dolor de estómago intenso
Los síntomas suelen aparecer entre 2 y 6 horas después de comer carne o productos lácteos, o tras la exposición a productos que contienen alfa-gal (por ejemplo, medicamentos recubiertos de gelatina).
Las reacciones al AGS pueden variar de una persona a otra. Pueden ser de leves a graves o incluso potencialmente mortales como ya mencionamos. La anafilaxia (una reacción potencialmente mortal que afecta a múltiples sistemas orgánicos) puede requerir atención médica urgente.
¿Puedo contraer el SGA por la picadura de una garrapata?
Sí, el SGA está asociado a la picadura de garrapatas. Las pruebas sugieren que el SGA se asocia principalmente a la picadura de una garrapata estrella solitaria en Estados Unidos, pero no se han descartado otros tipos de garrapatas. Otras especies de garrapatas se han relacionado con el desarrollo del SGA en otros países.
¿Cómo sé si tengo SGA?
El SGA es diagnosticado por un médico especializado en alergias u otro profesional sanitario mediante un historial detallado del paciente, un examen físico y un análisis de sangre que busca anticuerpos específicos (proteínas producidas por su sistema inmune) contra el alfa-gal.
El médico también puede recomendar pruebas cutáneas de alergia.
¿Qué debo hacer si tengo SGA?
El AGS debe tratarse bajo la supervisión de un alergólogo u otro profesional sanitario.
Muchos alimentos y productos contienen alfa-gal, por lo que deberá colaborar con su médico para saber qué productos debe evitar. La recomendación es evitar las picaduras de garrapatas. Las nuevas picaduras pueden reactivar las reacciones alérgicas al alfa-gal.
