La mencionada sustancia suele ser obtenida mediante una plata Datura Stramonium, que se da mayormente en España y en países de Latinoamérica. 

Las semillas de esta planta puede ser ubicada en la flor la cual contienen dos alcaloides, entre ellos la escopolamina. Al momento de combinar estos narcóticos con diversos compuestos químicos, se produce la sustancia conocida como burundanga.

De acuerdo a lo reseñado por el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid, la burundanga tiene efectos tanto psíquicos como físicos,  que tiende a actuar sobre las áreas del cerebro relacionadas con la memoria y la cognición, provocando amnesia temporal, confusión y desorientación. 

Mientras que la persona esta bajo los efectos de esta sustancia pierde casi por completo la capacidad de recordar lo sucedido, lo que puede ser un impedimento para reconstruir los eventos durante la intoxicación.

Entre los síntomas que pueda manifestar una persona afectada, se encuentra la sequedad de las mucosas, dilatación de las pupilas, visión borrosa y debilidad del pulso. Además, puede generar sensación de debilidad o incluso parálisis temporal.

La duración de la pérdida de memoria varía según la dosis, pero generalmente se prolonga alrededor de dos horas, dejando a la persona consciente pero sin capacidad de retener recuerdos recientes, lo que la convierte en una sustancia especialmente peligrosa en situaciones de abuso, según las fuentes citadas.

La burundaga es una droga que puede ser transmitida de diversas manera, lo que facilita su uso en contextos tanto legales como ilegales. Una de las formas más comunes es a través de la comida o la bebida, donde se disuelve sin alterar el sabor, el color o el olor, pasando prácticamente desapercibida para la víctima. Otra de las maneras más frecuente es el por la inhalación, que puede darse de forma accidental o intencionada.

Según lo informado por el Instituto Nacional de Toxicología de España, para prevenir la intoxicación por escopolamina, es fundamental adoptar medidas de precaución, especialmente en entornos sociales. Por lo que recomienda evitar recibir bebidas, alimentos, dulces o cigarrillos de personas desconocidas, ya que podrían estar adulterados.

De esta misma manera no dejar  nunca la bebida desatendida en lugares públicos como bares, discotecas o eventos sociales. Es más seguro desechar una bebida descuidada y obtener una nueva.

Además, hay que tener cautela con las personas que ofrezcan muestras de productos, como perfumes, en la vía pública o en lugares poco concurridos, ya que podrían contener sustancias nocivas.

En otros lugares concurridos, como el transporte público, es aconsejable evitar las interacciones que puedan comprometer la seguridad, según indica el instituto anteriormente mencionado.