Un matrimonio que terminó en tragedia: un divorcio y una violenta pelea a cuchillo que resultó en dos muertes
Una breve discusión entre los exesposos por desacuerdos escaló rápidamente a insultos y un enfrentamiento físico
Sucesos.- Los habitantes de la urbanización Prado del Lago, conjunto 3, calle 1, en Ciudad Alianza (Guacara), nunca imaginaron que una noche común se vería empañada por gritos de auxilio que terminarían en tragedia. La vivienda compartida por Jessika González (40) y Luis Eduardo Jaimes (37), quienes se encontraban en medio de un proceso de divorcio, fue escenario de una violenta pelea a cuchilladas que culminó con la muerte del hombre. Horas después, Jessika también fallecería a causa de las graves heridas sufridas.
Según información local, González llegó a la casa acompañada de su abogada y un cerrajero con la intención de cambiar los cilindros de la puerta. Ella había obtenido una sentencia favorable en el proceso de divorcio y buscaba ejecutar esta medida para desalojar a Jaimes sin su consentimiento.
Sin embargo, una breve discusión entre los exesposos por este desacuerdo escaló rápidamente a insultos y un enfrentamiento físico. Se desconoce quién inició el ataque, aunque algunas versiones indican que el hombre encerró a Jessika en la vivienda. En un intento desesperado por escapar de su trágico destino, ella comenzó a gritar pidiendo ayuda.
Se cree que en medio de su ira, Jaimes buscó un cuchillo con la intención de apuñalar a su expareja. En un acto de defensa, Jessika también logró herir a Jaimes cerca del corazón.
Alertada por la violencia del episodio, la abogada de Jessika salió en busca de ayuda para detener lo que ya se vislumbraba como una tragedia inminente.
Los primeros en llegar al lugar fueron funcionarios de la Policía Municipal de Guacara (Poliguacara), quienes encontraron en la cocina el cuerpo sin vida de Jaimes con múltiples heridas por arma blanca. A poca distancia, encontraron a González aún con vida, pero también gravemente herida.
El horror se apoderó rápidamente de la urbanización mientras los vecinos se acercaban para entender lo sucedido. En medio de esa dantesca escena, Jessika fue trasladada de emergencia al Ciudad Hospitalaria Enrique Tejera (CHET). Lamentablemente, a pesar del esfuerzo médico, falleció en horas de la tarde del martes 19 de noviembre debido a la gravedad de sus heridas.
Las muertes de González y Jaimes han consternado toda la entidad carabobeña, también debido a las diversas hipótesis que rondan el caso, sin embargo, las autoridades aún no han esclarecido los detalles de este lamentable suceso.
Se ha confirmado que ambos no tenían hijos en común.